miércoles, 17 de noviembre de 2010

Solísimo

La noche se le recostó en la espalda.
Sabía que ese no era su destino.
Una luz venida del deseo le iluminó el vacío.
Lloró sin llorar.
Iba dolido. 

1 comentario:

  1. Leerte es esa necesidad que reconforta. Sencillamente.
    Te quiero mucho.

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