tengo ante mí
como en un juzgado
el diario de hoy
y mi cierta mirada
la duda
su constante martillo
me parte el cráneo
y se ahorca cuando llega a la garganta
no puedo traducir
lo que nada en mi cabeza
no tengo verdades
solo unas ideas vagabundas
que no piden permiso
ni se hunden
tengo ante mí
como ante el secretario del juzgado
el diario de hoy
y mientras un gobierno destruye
los nuestros se desatan
y mi cabeza se pierde en el descrédito de sí misma
unas pocas certezas
dos o tres ideas
no alcanzan para estar tranquila
las vagabundas de mí
no logran unir palabra con palabra
tengo ante mí
verdades de los otros
algunas coincidencias
y el mar de mis pensares
rondan mi ola de incertidumbre
y el dolor por mi silencio
la incerteza
cierta descredulidad
a veces creo que no se
otras
pienso que solo no puedo pronunciar sus nombres
me disculpo
pienso que estoy hecha para el lenguaje poético
o la canción
tengo ante mí
el diario de hoy
y veo el mundo de estos días
mientras tomo mi mate con sacarina
el cuerpo ajado de dormir mal
y una insistente fatiga que augura malos días
martillea sobre mis cejas
el deber ser de los militantes
y la esbeltez de las bailarinas
en medio
yo y el diario de hoy
acusante
acuciante
estoy rodeada de gente que sabe lo que dice
todos pueden explicar claramente las cuestiones
y yo
me suspendo
creo entender y cuando entiendo
mis ideas vagabundas rumban para otro lado
el baile de las perdidas
si
el mate no se toma con sacarina
así como exigir cuál es la mejor política de alianzas
dudo
el diario de hoy extrema mis debilidades políticas
he aprendido
últimamente
que lo mejor es callar
así lo hago pero eso mismo me obliga
a escuchar más profundamente
y arranca como nuevo
el círculo dudante