lunes, 26 de julio de 2021

Encuentro con el espejo


 

En este parecerme a vos y en ser diferente.

En este encuentro con el espejo y en mi risa

diciendo

he aquí una Lidia actualizada en sus pechos caídos,

su ironía

y su desesperación por dar siempre un supuesto último bocado

que nunca será el último.

 

En este parecerme a vos

escapando de vos sucede el ir huyendo

-siempre huyendo- porque es mortífera la oscuridad,

como mortales son los pliegues desconocidos -que no logro acomodar 

para que sean habitables-

igual a la impudicia de ir hacia la nada con salvajismo.

 

En este parecerme a vos no hay mapa,

sigo perdida como el primer día y más hondo.

Sigo en la ajenidad de tu mirada o de tu rechazo.

Sigo sin conocerte, pero encontrándote en mis pozos.

 

Sigo escapando, -mi vida se hace con esa matriz-

y sus trochas no reciben locomotora alguna.

 

En este parecerme a vos calculo,

¿cuánto falta para que termine este combate?

A cuántos lugares deberé volver para encontrar esa respuesta

o tal vez

ahora pienso

la respuesta esté adelante.

 








jueves, 15 de julio de 2021

Otro insomnio

 



Y la noche no tiene un lujo más que mis gatas.

Busco el sueño o la ocupación

la productiva,

la magnífica actividad de los humanos que adoran el sol

y, en esa búsqueda,

me estrangulo en vulgaridades:

 

un locutor,

un adivinador,

alguien que dice las noticias me invaden o lo permito.

Paso a la acción, me abanico,

desde los tobillos y hasta las rodillas

un fuego del invierno arranca a costa de todo sueño o reparación

y en el nulísimo andar de las sábanas

la brevedad de mi cuello no logra sentirse acorde.

 

¿Dónde está mi voz?

¿dónde las palabras que elegía?

¿dónde el deseo de ser?

Algo quedó enterrado entre estas cinco paredes,

algo dejé morir o fue atacado por un batallón de ácaros.

 

¿Dónde podré poner a descansar mi malhumor?

¿Cuándo, por fin, tendré el cuero curtido y seré mansa?

¿Cómo haré para que el silencio no me abrace?

 

Tal vez esta noche pueda dormir o tal vez no.

Un nuevo esfuerzo inquerido se asienta y me desarma.

Soy arena, voy siendo nada.